'CAFÉ PASADO' #24: 13 años después
Sábado 23 de
julio. Trujillo, la ciudad de la eterna primavera, se viste de azul y blanco
para recibir al campeón. Alianza Lima pisaba el Estadio Mansiche para enfrentar
a un siempre difícil Carlos Manucci.
El partido
nos mostraría a un Alianza dispuesto a proponer y a inclinar la balanza a su
favor lo más pronto posible, pero los locales harían respetar la casa contrarrestando
los ataques blanquiazules y generando acciones de peligro en el arco custodiado
por el buen Franco Saravia.
En líneas
generales, veríamos un ida y vuelta bastante emocionante. Para mí, hoy en día,
ver el ataque de Alianza Lima asociarse, rotar, tocar y definir es un placer,
me tienen siempre al borde del asiento. Pese a ciertos acercamientos de los
trujillanos, las sociedades construidas por Lavandeira, Barcos, Concha, Aldair
y el mismo Arley, eran impecables. Producto de ello fueron los 7 remates al
arco que se vieron en el partido por parte del elenco victoriano.
El primer
tiempo, pese a haber un despliegue de buen fútbol, no movería el marcador a
favor de ninguna de las dos escuadras. Pero llegada la segunda mitad es que la
balanza se inclinaría a nuestro favor...
Por enésima
vez, a los 58’ minutos, Pablito Lavandeira iniciaría la jugada llevando hacia
la banda al central Narváez, toca para “Jairocó” quien abre la cancha con el
“parcero” Arley. El Berraco, de primera y sin pensarlo, le cede el balón a
Aldair que recibe de espaldas y gira inmediatamente para hacer la pared con el
colombiano más querido por los blanquiazules. Define cruzado y vence a Manuel
Heredia. Golazo producto de una buena gestión por parte de los de arriba. Arley
demostrando, como siempre, que quiere quedarse y Aldair, nuevamente,
diciéndonos que quiere ser titular semana a semana.
Luego de
ello, Alianza buscaría la tranquilidad, pero el marcador no se movería más
gracias a las buenas intervenciones de ambos guardametas (Heredia le saca una a
ALdair...) dando por culminado el encuentro y otorgándole una tremenda victoria
en Trujillo, que ya se nos hacía esquiva por 13 larguísimos años.
Para ir
cerrando, párrafo aparte para las buenas actuaciones de muchos. Aldair, moreno,
tranquilo, sabemos que sales con mucha bronca, pero pronto va a entrar y todo
el estadio se va a caer. Arley, ay, parce, eres una locomotora, una máquina. Christian,
por fin te vas acomodando y poniendo encima de los rivales tu mundial. Jairo,
juegue que usted sabe. Pablito, ya qué te puedo decir, comándanos hasta el
final. Todo el equipo muy bien, pero siempre podemos aspirar a más.
Y sí,
Alianza Lima por fin ha ganado en Trujillo después de tantos años y tantos
extraños y dolorosos partidos en esa linda tierra del norte del Perú. Es así
que, sin más que agregar, me retiro a alistar mis maletas, pues AL Potrillo le
toca ver el siguiente partido desde la tribuna.
Alguien por
fin puede decir: “Nos vemos en Matute, gente.”
Arriba
Alianza toda la vida.
Comentarios
Publicar un comentario